• DOMINGO,  28 ABRIL DE 2024

Salud  |  06 junio de 2022  |  12:00 AM |  Escrito por: Administrador web

Científicos "revivieron" las células de la retina de un donante muerto para revolucionar las terapias de enfermedades del ojo

0 Comentarios

Imagen noticia

Se ha pensado que la muerte en el organismo humano se produce cuando cesa la actividad circulatoria, respiratoria o cerebral.

Aunque después de la muerte muchos órganos de donantes se pueden trasplantar, utilizando técnicas para alargar su viabilidad, los tejidos del sistema nervioso central dejan muy pronto de ser viables después de que cesa la circulación sanguínea. Y esto impide que puedan usarse para trasplantes.

Los riñones, por ejemplo, pueden permanecer viables fuera del cuerpo entre 24 y 36 horas. Pero los tejidos del sistema nervioso central, los miles de millones de neuronas que transmiten información sensorial como señales eléctricas, pierden su potencial para trasplante muy rápido después de la muerte.

Pero ahora un equipo de investigadores del Centro del Ojo John A Moran de la Universidad de Utah, Estados Unidos, asegura que lograron "revivir" las células neuronales encargadas de la detección de la luz en retinas de donantes muertos.

Los científicos describen cómo usaron esas retinas para investigar cómo podrían revivir las células asociadas con la vista, las llamadas células fotoreceptoras.

Y además de "revivir" las células después de la muerte del donante, también lograron reestablecer la comunicación entre ellas.

"Pudimos despertar las células fotorreceptoras en la mácula humana, que es la parte de la retina responsable de nuestra visión central y nuestra capacidad de ver detalles finos y colores", explicó en un comunicado la científica del Centro del Ojo Moran, Fatima Abbas, autora principal del estudio.

"En los ojos obtenidos hasta cinco horas después de la muerte de un donante de órganos, estas células respondieron a la luz brillante, luces de colores e incluso destellos de luz muy tenues", agregó.

Para el estudio los investigadores utilizaron retinas, como modelo del sistema nervioso central, recolectadas de humanos y ratones muertos.

Descubrieron que podían "despertar" las células fotorreceptoras, células que detectan la luz y nos permiten ver, hasta cinco horas después de la muerte de un donante de órganos.

Pero encontraron problemas. Descubrieron que las células fotorreceptoras no podían comunicarse con otras células en la retina y determinaron que el factor que conducía a esta falta de comunicación era la falta de oxígeno.

Para superar este problema, los investigadores lograron obtener ojos de donantes con menos de 20 minutos desde el momento de la muerte, y diseñaron una unidad de transporte especial que proporcionaba a los ojos donados oxígeno y nutrientes.

Con este enfoque, descubrieron que podían hacer que las células de la retina se comunicaran de la misma manera que lo hacen en los cuerpos vivos.

Ahora será posible estudiar la visión humana en formas que no se habían podido investigar realizando pruebas con animales en el laboratorio.

Pero aún más importante, la investigación podrá conducir a futuras nuevas terapias para enfermedades del ojo.

"Restaurar la actividad funcional de los fotorreceptores es un hallazgo sin precedentes que puede abrir la puerta a futuros tratamientos", dice el Centro de Oftalmología Barraquer.

PUBLICIDAD

Comenta esta noticia

©2024 elquindiano.com todos los derechos reservados
Diseño y Desarrollo: logo Rhiss.net