¡Este premio no es solo mío, es de todas!

Por Nathalia Baena Giraldo

Diana María García Cardona, licenciada en Biología de la Universidad del Quindío, especialista en Bioética, magíster y doctora en Ciencias Biomédicas, hace parte del alma mater desde el 2008 y es docente ocasional tiempo completo del programa de licenciatura en Educación Física, Recreación y Deportes. Por su labor con las mujeres en su campo profesional y el impacto de su trabajo en el grupo de investigación: Fisiología de la Actividad Física y la Salud (GIFAS), obtuvo el pasado 7 de marzo el premio Mujer Sinergia Iberoamericano 2023, cuya ceremonia de premiación tendrá lugar en Mérida Yucatán, México, el próximo 22 de marzo.

Hablemos del premio Mujer Sinergia Iberoamericano 2023

Esta convocatoria estaba enfocada hacia la mujer y cómo servir de inspiración para otras mujeres, niñas y jóvenes. Dentro de las vertientes estaban: política, medio ambiente, educación y ciencia, esta última –en mi caso– direccionada a la fisiología del ejercicio y el entrenamiento deportivo. Además, los programas de educación física, recreación y deportes, a nivel nacional e internacional, tienen un número muy bajito de mujeres, siempre hay más hombres estudiantes y docentes, así que era una buena oportunidad para visibilizar el grupo.

Desde el 2015, el profesor Oscar Eduardo Sánchez y yo fundamos el Grupo de Investigación en Fisiología de la Actividad Física y la Salud (GIFAS) y a medida que avanzamos hemos tenido el honor de contar con muchos docentes. También hemos logrado que, siendo tan pocas mujeres en el programa, muchas de ellas se incorporen. Actualmente el grupo de investigación está conformado por 28 personas, de las cuales 12 son mujeres entre estudiantes y docentes.

Yo no me iba a presentar, fueron las mismas mujeres del grupo de investigación las que me motivaron, las que literalmente prepararon todo, organizaron el video que debía enviar como requisito, fue muy lindo todo ese apoyo que recibí de ellas. Me dijeron: profe, usted se tiene que presentar, usted nos ha inspirado, por usted estamos aquí y por usted queremos hacer ciencia, usted ha sido nuestra mentora.

¿Qué hace falta para que más mujeres hagan investigación y ciencia?

Se necesitan buenas mentoras. Infortunadamente a veces entre nosotras las mujeres no existe la sororidad. Uno lo ve y me ha pasado. Te quieren subestimar y te dicen que no puedes. Lo que fortalece este grupo es que tenemos una sinergia y una cohesión total. Aquí todos nos apoyamos entre todos, nadie es más importante que otro. Trabajamos de manera mancomunada y si alguien quiere hacer una ponencia, le enseñamos y le ayudamos porque queremos que todos salgan adelante. Uno de los problemas es ese: que a veces hay mujeres que quieren opacar a otras, y si en este mundo machista, con tantos micromachismos, ya nos opacan, ¿por qué otra mujer tiene que hacerlo también?

Cuando se enteró que ganó el premio, ¿qué fue lo primero que pensó y sintió?

La verdad, lo primero que dije fue ‘¡estás mujeres qué hicieron, en qué me metieron!’. Este premio no es solo mío, es de todas, porque durante mi trayectoria también he tenido mujeres mentoras, incluyendo a mi madre, quienes en mi pregrado y posgrado fueron espectaculares, esenciales en mi proceso personal y profesional. Me siento muy feliz por este reconocimiento.

¿En qué proyectos de investigación está trabajando ahora?

Ahora estamos en un proyecto que está siendo financiado por la Vicerrectoría de Investigaciones de esta institución, en el que trabajamos el Comportamiento de biomarcadores fisiológicos en deportistas universitarios con respecto a una prueba de potencia aeróbica máxima en diferentes alturas.

Nuestros deportistas uniquindianos normalmente juegan en zona centro del país, pero también juegan en Neiva, Fusa o Manizales, con diferentes altitudes. Ellos pueden clasificar aquí y tener que ir a competir a otra altura, entonces queremos investigar cómo se comporta la glucosa, el lactato, la hidratación, la presión arterial y todos estos biomarcadores cuando estos deportistas se mueven a diferentes alturas: aquí estamos a mediana altura, entonces los vamos a bajar a El Espinal sobre los 400 metros sobre el nivel del mar y vamos a subirlos a Cajamarca sobre los 2000 m.s.n.m. Y en esas tres alturas, a través de la prueba de potencia aeróbica máxima determinaremos esos comportamientos.

A futuro estoy proyectada para trabajar sobre La mujer en la ciencia dentro de la Uniquindío. Ya hablé con varias docentes investigadoras de algunas facultades para investigar el porqué las mujeres uniquindianas eligen unos pregrados específicos, qué factores influyen en esas decisiones y cuántas de esas mujeres están incorporadas en los grupos de investigación de esos programas académicos.