La muerte de Jaíver Castañeda, de 57 años de edad, conductor del bus de la empresa Buses Armenia S.A, afiliada al sistema integrado de transporte Tinto, que rodó a un pequeño abismo cerca al Club Campestre, en la ruta Armenia- aeropuerto El Edén, se produjo por un infarto fulminante, según las primeras hipótesis de las autoridades.

Castañeda había hecho la primera ruta dominical entre el coliseo del Café y el aeropuerto El Edén, hacia las 7 de la mañana de ayer domingo, según dijo el gerente de Buses Armenia Ómar Aristizábal. El conductor no reportó ningún problema en su salud. Cerca de las once de la mañana salió del aeropuerto, hacia Armenia, sin pasajeros, y dos kilómetros más adelante, el bus empezó a acercarse a la zona de cultivos de plátano, hasta que rodó sin control hasta una pequeña hondonada, según narró un compañero de la misma empresa que transitaba detrás del vehículo que manejaba Castañeda.

La inspección de las autoridades comprobó que el vehículo no tuvo movimientos extraños, ni activación de frenos, además del reporte de buenas condiciones del carro por parte de expertos de la empresa, lo que hace pensar que el chofer sufrió un infarto fulminante que no le dio tiempo de ninguna maniobra. Por fortuna el vehículo transitaba sin pasajeros, lo que no sucede muy a menudo los días domingos, pues muchos deportistas que practican fútbol en las canchas de El Edén utilizan este servicio que va hasta el coliseo del café en Armenia.

Hasta anoche el cadáver era mantenido en la morgue de Calarcá, donde se le practicó la necropsia respectiva. Medicinal Legal informará, después de los estudios pertinentes, las verdaderas causas de la muerte de Jaíver Castañeda.

El conductor había ingresado a la empresa Buses Armenia S.A hacía 5 meses, y en su hoja de vida reporta que vivía en el barrio Villa Liliana de Armenia. El lugar de sus exequias no se ha definido.

El bus de la empresa Buses Armenia S.A fue recuperado ayer mismo y llevado a los talleres de la institución para ser puesto en recuperación.